La mezcla de aceites vegetales, manteca de karité y avena no solo garantiza un perfecto cuidado hidratante y regenerador, sino que también protege la piel de los rayos del sol por el factor SPF 15+.
Es la avena que contiene beta-glucanos (prebióticos), que son capaces de apoyar las reacciones de defensa del cuerpo, tienen un efecto antibacteriano y antioxidante, mantienen suficiente humedad en la piel, minimizan el enrojecimiento y otros síntomas de la piel sensible, contribuyen a ralentizar el envejecimiento de la piel (incluida la reducción de la aparición de arrugas y el tono áspero desigual).
La actual manteca de karité, frambuesa, tamanu y aceite de morera no solo complementan todos los efectos aumentados de la avena, sino que gracias a su combinación los apoyan y fortalecen.
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